¿Has pensado en crear un eCommerce para tu tienda física? En este blog post te mostramos un caso de éxito al trasladar esa experiencia de compra a un eCommerce y las técnicas empleadas para lograrlo.
El mundo del eCommerce parece ser el día a día en la sociedad actual, todo gira en torno al internet. Desde hacer consultas, búsquedas, navegación, compartir información, noticias, memes, hasta compras en línea, transferencias, pagos ¡todo gira en torno al internet!
A decir verdad, aun cuando me dedico a trabajar frente a una computadora conectada a internet todo el tiempo, me gusta disfrutar de los momentos offline por ejemplo: ir al súper.
Ir al súper es una experiencia divertida, relajante, interesante, ver productos y secciones nuevas, caminar por los pasillos y que tal las “muestras gratis”, todo pareciera estar en orden de interés, pero todo tiene una razón de ser.
A muchos nos gusta darnos el espacio y tiempo de ir al súper a otros cuantos les parece innecesario pues cada pasillo recorrido aumenta los productos en el carrito y si, la mayoría de las veces es la intención.
Ahora, imagina tener que vivir esta experiencia en internet, es decir, hacer el súper comprando en línea con cientos o miles de productos de los que no tenemos una idea certera de cómo están organizados ¿Cuánto tiempo estarías dispuesto a invertir antes de encontrar el producto exacto que buscas? ¿Qué tan amigable te gustaría que fuera el sitio web para que puedas encontrar de manera lógica y rápida los productos de tu interés?
Te cuento mi experiencia.
A continuación te comparto mi experiencia sobre un proyecto del que fui parte: una abarrotera en línea, donde todas estas preguntas se plantearon en un inicio buscando que cada usuario tuviera la mejor experiencia de compra.
El proyecto llegó con la clara intención de ser totalmente rediseñado, para esto se tenía que tener en cuenta varios puntos: conocer los objetivos del rediseño, considerar que la abarrotera ya era reconocida y contaba con presencia física y digital.
Entonces, ¿Qué puntos se tomaron en cuenta?
Inventariar. Para comenzar se tuvo que estudiar y reconocer absolutamente todo el inventario de la tienda.
Rediseño. Entender la estrategia del rediseño del e-commerce. Para esto nos detuvimos a analizar cuál era el principal objetivo: ¿Aumentar las ventas al menudeo?, ¿Aumentar las ventas a mayoreo?
Análisis. Registrar y analizar el comportamiento del cliente mientras hace las compras en el sitio: ¿Cuál es su flujo entrando al sitio?, ¿Dónde hace clic?, ¿Qué escribe?, ¿En dónde abandona el sitio?, etc.
Cambiar fondo. Implementar mejoras con Odoo, con base en la investigación previa.
Cuando se tuvieron en claro todos los puntos se comenzó a poner en orden el inventario, ya que debía tener coordinación y claridad, tanto en el punto de venta físico como en las piezas disponibles por producto en la tienda digital.
Gracias a la herramienta de inventario en Odoo se logró organizar de mejor manera la información, ya que nos permitió organizar categorías padre, subcategorías y etiquetas para cada artículo, favoreciendo una búsqueda más rápida e intuitiva de los productos (anexo un video breve en donde muestro como se hace una categoría padre y subcategoría).
Esto permite que al ubicar un producto de tu interés, se desplieguen recomendaciones relacionadas con el producto que elegiste. Esta es la misma dinámica que aplican en los supermercados, mientras vas por los pasillos te encuentras con las “muestras gratis” o promociones que te hacen comprar cosas por impulso, acá también existen y se llaman ventas cruzadas.