¿Qué es el Home Office?
Es una modalidad de trabajo desde casa que permite tener varios beneficios. Está apertura en las organizaciones permite beneficios como horarios flexibles, mayor productividad laboral, motivación en los colaboradores, ahorro en traslados y costos relacionados a infraestructura, entre otros; pueden parecer el sueño hecho realidad de empleados, colaboradores y empresas. Sin embargo, es necesario que la disciplina sea la principal herramienta de trabajo. Las prácticas laborales han cambiado radicalmente debido a que cada vez más y más personas trabajan desde casa.
De acuerdo con un estudio de Gallup publicado en NY Times, el número de trabajadores que manifiestan invertir parte de su tiempo de trabajo desde casa va aumentando progresivamente desde 2012.
La disciplina es la clave
Sin disciplina el trabajo desde casa puede convertirse en una opción contraproducente.
De no ser realizado de manera adecuada, el Home Office puede terminar por impactar negativamente el desempeño laboral. Si quieres implementar un esquema de trabajo desde casa que sea efectivo y medible, debes tener clara la estrategia de trabajo que se seguirá y tener una buena comunicación con tus colaboradores para tener en claro cuáles serán las responsabilidades de cada uno. Pero, ¿Cómo implementar una metodología de trabajo en casa efectiva?
Tips
¿como lo logramos de forma efectiva y eficiente?
Metas Claras
Al no haber una supervisión directa, ambas partes deben tener claro qué se espera lograr durante la jornada laboral y cumplir en tiempo y forma.
Comunicación
Es importante que exista una comunicación constante entre los miembros del equipo y reportar avances a tiempo para evitar la impresión de que el trabajo remoto afecta negativamente la operación.
Evitar distracciones
Crea un ambiente de trabajo propicio para trabajar en casa. Preferentemente un lugar cerrado, alejado de las distracciones de la televisión, mascotas y miembros de familia, que te permita mantener separadas tu vida personal y laboral. Evita estar en lugares comunes que te distraigan, como puede ser la sala, el comedor o simplemente frente a la televisión. No permitas que las cosas que se desarrollan frente a ti te quiten el tiempo.
Prepara tu ambiente
Equipa tu lugar de trabajo con un iluminación, escritorio y una silla que se ajusten a tu estilo de trabajo, la idea es crear un espacio lo suficientemente cómodo para trabajar durante tu horario establecido, pero que no invite al sueño.
Conectividad
Es necesario contar con un servicio de internet de clase empresarial que no presente fallas y un equipo de cómputo rápido. Se debe evaluar qué otras herramientas tecnológicas se han de tener a mano, como: celular inteligente, tablet, impresora y software para colaboración a distancia.
Horarios
Recuerda que la responsabilidad y la disciplina son los valores más importantes cuando se realiza el home office. Establece un horario de oficina y mantente siempre en contacto con supervisores y colaboradores. El home office no implica tener un menor nivel de profesionalidad. No combines tareas laborales y personales.
Conócete
Evalúa si el trabajo en casa es para ti. El trabajo en casa puede ser una estructura laboral adecuada para muchas personas, sin embargo puede que no sea perfecta para ti. Si eres una de esas personas que no saben cuando parar de trabajar, les cuesta concentrarse, suelen aislarse con facilidad o bien que necesitan del contacto directo de tus compañeros de trabajo para trabajar más eficientemente puede que el home office no sea para ti.
Conclusión
Y al final ¿que hacer?
Si en tu empresa te han hablado o te han propuesto trabajar algunos días bajo esta modalidad, o cuando buscas un empleo encuentras en las vacantes el término home office, seguir ésta lista de consejos cortos te ayudará a dar los primeros pasos a lo que se podría convertir en tu forma de trabajo por el resto de tu vida laboral, rendir más y darle ese tiempo a tu familia que antes gastabas moviéndote a una oficina.