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Este post está dirigido a todo el público sin importar rol u ocupación. Habla sobre prácticas que podemos llevar a cabo durante la contingencia para cuidar de nuestra salud mental.
En momentos de crisis como este, nuestras acciones individuales cobran más importancia que nunca pues contribuyen a mejorar o empeorar la situación social que vivimos. Sabemos muy bien que para cuidar de nuestra salud física debemos quedarnos en casa. Sin embargo, poco sabemos sobre cómo cuidar de nuestra salud mental.
Estar en casa sin poder salir afecta nuestro ánimo negativamente y nos obliga a buscar alternativas para sobrellevar la contingencia. Así como usamos la máscara para proteger nuestras vías respiratorias, debemos también de adoptar prácticas que protejan nuestra esfera mental, pues tal y como los virus, las afecciones psicológicas no se ven pero se sienten. El momento que vivimos no es normal, y requiere de acciones extraordinarias para sobrellevarlo. En Vauxoo somos personas primero y nos preocupamos por el bienestar de nuestro equipo, de nuestros clientes y de la comunidad, por eso aquí les compartimos una serie de prácticas que nos pueden ayudar a todos a mantener una buena salud mental en este momento tan difícil.
“Así como usamos la máscara para proteger nuestras vías respiratorias, debemos también de adoptar prácticas que protejan nuestra esfera mental”
Modera tu consumo de noticias
Está bien mantenerse informado y debes de hacerlo, pero si te despiertas y te acuestas viendo noticias es tiempo de parar. Las noticias pueden ser adictivas, sobre todo en el momento actual en el que vemos números y gráficas de contagiados que cambian día con día. Saber que hay cien, o mil contagiados más en tu país o en cualquier lugar del planeta, no te protegerá más. Ya conoces lo serio de la situación y ya estas tomando las medidas que están a tu alcance, ahora protege también tu esfera mental y toma distancia.
“No te despiertes y te acuestes viendo noticias”
Habla de otra cosa
¿Cuántos muertos van por COVID-19 en el mundo?
Si este se ha vuelto tu tema favorito de plática es hora de cambiarlo. Vivimos un momento muy estresante y sin precedentes. Pocos momentos han traído tanta incertidumbre para la humanidad como este, y no sabemos por cuánto tiempo continuará, así que debemos de construir un refugio mental.
Hablar diario sobre la pandemia afectará tu ánimo y el de los que te escuchan negativamente. No hay necesidad de ponerle más atención a este tema, ya tienes varios recordatorios en tu rutina diaria. Hablar de esto no va a hacerte sentir mejor y si pone tu bienestar psicológico en riesgo.
“Hablar diario sobre la pandemia afectará tu ánimo y el de los que te escuchan negativamente”
Mantén una rutina
Ya sea que estés trabajando desde casa, o estés cuidando a tus hijos y atendiendo el hogar (o ambas!), ten una rutina. En este período es difícil distinguir el lunes del viernes, por eso se vuelve importante que conservemos algunos hábitos. Trata de acostarte a dormir más o menos a la misma hora, alterar nuestro ciclo de sueño constantemente puede hacernos sentir cansados o ansiosos. Despierta temprano, dormir más horas de las que necesitamos también nos puede hacer sentir cansados durante el día.
Muévete
El ejercicio físico ayuda a sobrellevar los síntomas de depresión y ansiedad, esto se debe a que tenemos un sistema nervioso antiguo. Muchos de nuestros mecanismos de respuesta, entre ellos el estrés, se remontan a la época en que los humanos vivían en cavernas y debían defenderse de amenazas físicas. La respuesta de estrés era útil en ese contexto pues nos permitía tener más recursos energéticos disponibles para usar nuestros músculos y correr o atacar.
Las preocupaciones que nos genera un virus o la incertidumbre económica, nuestro cuerpo las vive como amenazas físicas y responde de la misma manera: Secreta adrenalina, aumenta la frecuencia cardíaca y se inhiben procesos relacionados con la ingesta de alimentos como la salivación y la digestión. Es por eso que en períodos de estrés prolongados, se puede alterar nuestra función digestiva y muchas otras cosas más.
“Las preocupaciones que nos genera un virus nuestro cuerpo las vive como amenazas físicas”
El estrés crónico, es decir el estrés por tiempos prolongados, acelera los procesos oxidativos en las células de nuestro cuerpo, y afecta de manera negativa al sistema inmunológico. Una forma de combatirlo es mantenernos físicamente activos, particularmente en momentos estresantes. Al ejercitarnos usamos los recursos que nuestro cuerpo ha producido como respuesta a aquello que nos amenaza o nos preocupa, y evitamos que se acumule y derive en estrés crónico.
“Una forma de combatir el estrés crónico es mantenernos físicamente activos”
Si está permitido en la región donde vives sal a caminar o a correr, elige horarios y calles poco concurridas y sigue todas las indicaciones de la autoridad local. Si no puedes salir a caminar, ejercítate en casa al menos 20 min al día, seguro hay un video para ti en internet.
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